¿Qué es la inclusión laboral para personas con discapacidad intelectual?

Según datos del Informe de Mercado de Trabajo de las Personas con Discapacidad de 2021, a 31 de diciembre de 2020 el número de personas con discapacidad paradas representa un 4.26% sobre los parados totales nacionales y, con respecto año anterior, el número de parados con discapacidad aumentó en un 11,92%. La inclusión laboral de una persona con discapacidad intelectual o de otro tipo es un gran reto para las empresas y los gobiernos que deberán esforzarse para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible enfocados en lograr el pleno empleo de mujeres, hombres, jóvenes y personas con discapacidad. En el artículo de hoy te contamos en qué consiste la inclusión laboral de las personas con discapacidad intelectual y qué medidas se pueden tomar. 

¿Qué es la inclusión laboral de personas con discapacidad?

En general, la inclusión laboral de personas con discapacidad supone la igualdad de oportunidades para estas personas, de forma que puedan realizar un trabajo de manera efectiva. 

Dentro de la discapacidad podemos diferenciar varios tipos: 

• Física o motora. Es aquella que afecta a una parte del cuerpo y no permite a la persona desenvolverse de forma convencional.
• Sensorial. Afecta a aquellas personas con una discapacidad visual, auditiva o en la utilización del lenguaje. 
• Intelectual. Es la que se refiere a las limitaciones que afectan a la vida de una persona de manera que les resulta más complicado aprender, comprender y comunicarse. 
• Psíquica. Es la que se relaciona con el comportamiento de la persona. 

El Informe anteriormente citado destaca que los parados han aumentado en todos los tipos de discapacidad y es más numeroso entre las personas con una discapacidad física, le siguen las personas con una discapacidad no declarada. 

¿Cómo se puede lograr la inclusión laboral de las personas con discapacidad intelectual?

En España existen una serie de medidas, reguladas en varias normativas, por las que se pretende conseguir la inclusión laboral de las personas con discapacidad. Destacamos las siguientes: 

• Cuota de reserva del 2%. La primera regulación que destacamos en relación a la inclusión laboral de las personas con discapacidad es la que establece la Ley General de discapacidad que exige que las empresas con 50 o más trabajadores deben tener en su plantilla un número de trabajadores con discapacidad de un 2% mínimo. En el caso en que la empresa no pueda cumplir con la cuota de reserva del 2% puede solicitar un certificado de excepcionalidad y plantear medidas alternativas como la contratación de un centro especial de empleo. 
• Contratación directa por cuenta ajena de una persona con discapacidad. En este caso también se regulan subvenciones y ayudas como las siguientes: 

Según el tipo de contrato podemos destacar las siguientes ayudas:

• • En el caso de los contratos indefinidos: 
    • Subvenciones: las empresas que contraten a una persona con discapacidad jornada completa recibirán 3.907 euros. Por otro lado, también existen subvenciones para la adaptación del puesto de trabajo o la eliminación de barreras. 
    • Bonificaciones en las cuotas de la Seguridad Social. También existen bonificaciones durante la vigencia del contrato para trabajadores con discapacidad severa o sin ella en las cuotas de la Seguridad Social que varían en función de la edad de la persona con discapacidad. 
    • Deducciones en la cuota íntegra del Impuesto sobre Sociedades. En el IS También se podrán aplicar deducciones cuando aumente el promedio de trabajadores en plantilla con un grado de discapacidad igual o superior al 33% o igual o superior al 65%.
  • En el caso contrato temporal de fomento del empleo:
    • En este caso también se aplican bonificaciones en la cuota de la Seguridad Social durante la vigencia del contrato para trabajadores con discapacidad severa o sin discapacidad severa. 
    • Igualmente, se podrán solicitar incentivos para la adaptación del puesto de trabajo o para el caso en que el contrato se transforme en indefinido. 
• Empleo autónomo de personas con discapacidad.  Otra forma de inclusión laboral de las personas con discapacidad es a través del empleo autónomo. En estos casos los autónomos con discapacidad reciben subvenciones por el establecimiento de actividad, para los intereses de los préstamos, para formación y para asistencia técnica.
• Capitalización de la prestación por desempleo y subvención de las cuotas. Las personas con una discapacidad igual o superior al 33% pueden solicitar el 100% de la prestación por desempleo en un pago único. 

Por lo tanto, tanto las empresas como las administraciones y cualquier persona pueden realizar acciones para favorecer la inclusión laboral y social de personas con discapacidad, de forma que nos acerquemos cada vez más a una sociedad inclusiva en la que las personas con alguna discapacidad alcancen el pleno empleo y se cumplan los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU.